martes, 1 de mayo de 2012

EL Piul: orígenes.


(Soto del Piul y cantiles yesíferos)


(Panorámica del Soto del Piul)

Cuando observamos la fotografía del Soto del Piul, dentro del término municipal de Rivas-Vaciamadrid, nos llaman la atención, entre otras cosas,  las huellas circulares de sus sistemas de regadío, o los bordes que delimitan este terreno: los cantiles y el río.

A lo largo de varias entradas intentaré profundizar en la etimología del lugar, así como en los orígenes de su formación y el modo en que se ha transmitido hasta nuestros días, formando parte del Parque Regional del Sureste.

Pero vayamos con el nombre, que es realmente curioso. Después de descartar posibles interpretaciones que nos podrían llevar a una etimología francesa ( en algún mapa del siglo XVIII aparece como Pioul ), me quedo con la que me sugirió Ángel Matías, un investigador  de la asociación del Parque Lineal del Manzanares. Según él se trataría de un fitónimo (palabra aún no reconocida por la RAE). Es decir, que derivaría del nombre de una especie vegetal. Así, partiendo de El Piornal, este nombre acabaría abreviándose en El Piulnal y, por último, El Piul. Y es que este origen, basado en otras plantas, es abundante en la zona: Carrascal, Poveda, Olmeda,... Hasta el punto de que, podríamos sugerir que Los Pernales también aparece como derivación de Los Piornales.

En cualquier caso, más allá de las teorías, lo cierto es que la utilización de este Soto ya estaba regulada desde la Baja Edad Media. Por ejemplo, de 1381 se conserva un documento que regula la utilización de sus dehesas entre el concejo de Madrid y el abad de Santa Leocadia (Archivo de la Villa de Madrid-S 3-99-16 y 3-99-17), tal y como publicó Carmen Cayetano Martín.

Pero ¿Dónde residía el valor de estos terrenos? Aparte de ser muy considerado por los reyes como cazaderos reales (junto con Vaciamadrid, el Soto de las Juntas,...), la mejor descripción nos la ofrece José Javier Ramirez Altozano en su libro Historia de los Bosques Reales de San Lorenzo del Escorial. Partiendo del Manual de Hacienda, que utilizaban los monjes jerónimos para la administración de sus posesiones, sabemos que:

" Los aprovechamientos más principales que goza este convento del dcho soto y dehesa, es la caza de conejos, porque se crían muchos, y se estiman por estar cerca de la corte, y la renta de la hierva y pasto de invernadero de vacas, yeguas y otros ganados mayores y ovejas y también de la leña de taray, fresno y otros arboles, que ay mucho en todo el soto y la broça del, porque en partes se cría mucho tarriço, retama, ollea y otras hiervas muy utiles para cocer yeso y hazer tejas y ladrillos y tambien se estima la pesca del río,..."

(op. cit. p. 262)

Este era el aprovechamiento del Soto del Piul, después de que el rey Felipe II hubiera decidido desprenderse de él para ofrecerlo a los monjes de San Lorenzo del Escorial, en los últimos años del  siglo XVI y principios del XVII.

1 comentario:

manolo dijo...

Bienvenido de nuevo a la blogosfera.
Se te esperaba.
Un abrazo.
El Eremita.