miércoles, 3 de agosto de 2011

El arroyo de los Migueles

(Encauzamiento del arroyo de los Migueles)

(Puente de ladrillo de los Migueles)

(Afloramiento del cauce del manantial de Capa Negra)

(Efectos de la riada del arroyo. 22 de septiembre de 2008)

(Silex en la ribera del arroyo)




El arroyo de los Migueles es el último afluente del río Manzanares, discurriendo la mayor parte de su curso en paralelo a la Autovía A-3.

Últimamente se han sucedido las noticias que tratan sobre este arroyo, generalmente relacionadas con las consecuencias de las riadas acontecidas en septiembre y octubre de 2008. Después de esas fechas, se ha acondicionado su cauce, incluyendo las riberas, convirtiéndolas en un paseo, e integrando esta zona de Vaciamadrid, separada por la carretera, en la ciudad de Rivas.

Además, ya funciona la página electrónica del Parque Didáctico del Jarama, que propone aunar Historia y Naturaleza, puesto que, además de su interés ecológico, en el paraje que discurre entre La Hoya y el cerro de la Oliva han sido restaurados algunos tramos de las trincheras de la Guerra Civil. En la citada página pueden verse los itinerarios y algunos estudios más completos y específicos del entorno.

Por último, hace unos días, ha sido aprobado por el Ayuntamiento de Madrid, el inicio de la construcción de un estanque de tormentas del arroyo, para evitar el efecto nocivo de las riadas.

Con esta entrada sólo pretendo aportar algún documento, que nos permita conocer mejor la historia de este cauce, muy ligado a la historia de nuestra ciudad. Así, sabemos que las primeras noticias del mismo se recogen en el Fuero de Madrid, de 1204. Allí, se nos dice que se trataba de un dehesa carrascal, cuyas rentas iban destinadas al mantenimiento de las murallas de la villa:

"El carasal de Balecas quomodo lo defeso el conzeio: et los molinos et el canal et toda la renda de ribas que habet ibi el conzeio sedeat semper per foro de la obra del adarve de madrid"

Otras noticias estarían relacionadas con el proyecto de un embarcadero para el Real Canal de Navegación del Manzanares. Por ello, se construyó un puente de ladrillo del citado canal para salvar las aguas del arroyo. Hoy en día el citado puente coexiste con el de la ampliación del cauce, pero sabemos que a lo largo del siglo XIX era un lugar conocido por su peligrosidad. Allí, en la carretera de las Cabrillas (actual Carretera de Valencia) o en el camino hacia la Salmedina y Congosto (donde ahora se encuentran los viveros y la Escuela de Protección Civil) se cometían diversas fechorías y asaltos. Más o menos enfrente se encontraba la famosa Cueva de los Migueles, conformando así un lugar privilegiado para los asaltantes. De ello nos da cuenta Manuel Fernández, en su obra El Collar del Diablo (Memorias de un resucitado), de 1866, cuando nos describe estos sucesos y la pasividad de la autoridad municipal. Esta situación determinaría que la Guardia Civil fuera instalada, junto al telégrafo y al ferrocarril, en Vaciamadrid, y no en Ribas del Jarama. Recomiendo la lectura de las páginas 231 a 235, que aquí os incluyo, donde encontramos una detallada descripción de la confluencia de los ríos y de los sotos del Piul y del Porcal.

Por último, una apreciación. Más o menos debajo del aparcamiento del Carrefour es posible contemplar una curiosa formación vegetal, que parece indicar un afloramiento de las aguas del manantial de Capa Negra, cuyas aguas vertían en el Arroyo de los Migueles. Sobre el tema, y para profundizar más, remito a otra entrada de este blog, donde recomiendo también los comentarios que me hizo llegar Arturo Ledrado.

1 comentario:

manolo dijo...

Bienvenido de nuevo a la blogosfera, ya sabes que aunque no estuvieses, se te esperaba.
Un abrazo.
El Eremita.